Belem Eslava: Recuerdo rojo

Aún recuerdo el último día que estuvimos juntos, fue el día de mi muerte. Cuando te fuiste, se quedaron conmigo las preguntas y una pelota roja y sucia que todavía guarda tu aroma, al que me he aferrado en este infierno porque pensar en ti le da propósito a mis días. Ese día, en el bosque que tantas veces visitamos, lanzaste la pelota roja más lejos que de costumbre, yo corrí tras ella, feliz por sentir la potencia del movimiento en mis piernas, anticipaba tu sonrisa cuando me vieras de regreso con la pelota en el hocico, pero esta vez … Continúa leyendo Belem Eslava: Recuerdo rojo

Eugenia Nájera Verástegui: El espejo de la verdad

Zerit no alcanzó a llegar al sepelio. Sin embargo, no podía faltar a su promesa de despedirse de la única persona que la comprendió en este horrible mundo que las rechazaba. A ella por ser «rara» y a su tatarabuela por su “defecto físico”. Las flores estaban marchitas, pero un joven colocó con solemnidad una sobre la tumba. Ella le agradeció, preguntó si conocía a su tatarabuela. Él respondió que no. Solo en sueños, le encargó transmitir su mensaje y llevarle una flor, pues todas eran horribles y nadie le había puesto las que ella amaba. Zerit sin duda supo … Continúa leyendo Eugenia Nájera Verástegui: El espejo de la verdad

Azucena Robledo Lara: Belleza Absoluta

Primero fue el cabello, simbolizaba un rasgo atávico del cual era necesario deshacerse. Expertos cirujanos plásticos lo extrajeron de raíz. Las cabezas calvas paseaban relucientes por los Centros de Adquisiciones y Convivencia, hasta que, un buen día, a alguien se le ocurrió substituir la parte superior del cráneo por bioplástico trasparente y añadir patrones de colores activados con cada pulso cerebral. Se convirtió en el último grito de la moda. Luego las máscaras se hicieron tendencia. Al principio no tenían tanta popularidad: entrañaban una cirugía permanente en la que el rostro original era removido para lograr un implante perfecto, pero … Continúa leyendo Azucena Robledo Lara: Belleza Absoluta

Andrea Jocelyn Mora Méndez: No estamos solas

El mundo se paralizó estos meses, por algunos meses. Las calles se quedaron vacías, y aunque afuera el mundo parecía detenido, nuestras emociones, nuestras alegrías, nuestros dolores, nuestros miedos y nuestras angustias no se detenían y estaban al acecho, mas activas que nunca. Entre cuatro paredes nuestros fantasmas se veían más grandes y nosotras más pequeñas, más vulnerables. He olvidado las veces que lloré pensando en todo lo que pasaba, en lo agobiada que me sentía, en lo confundida que estaba y en lo perdida que sentía mi vida. Mis planes se habían ido, y mis sueños no se cumplieron; … Continúa leyendo Andrea Jocelyn Mora Méndez: No estamos solas

Anja Aguilera: Situación de parabiosis

I Este hotel es regenteado por las siamesas juntas mantienen el orden, de otra manera sería imposible o no serían siamesas. Un octubre, la tarde abrasadora cayó rota de su letargo por el espasmo acuoso de la madre mientras, entre las tejas del techo un par −dos también− de viboreznos estrenan sus colmillos con el suave cascarón. La pierna de Vi, la izquierda fue la primera atajada por el fórceps la pinza y la fuerza son insuficientes llora madre, llora Vi y la enfermera empapa de lágrimas la sábana prevista para el recibimiento por la impotencia de no sustraer a … Continúa leyendo Anja Aguilera: Situación de parabiosis

Manuela Herazo Martínez: Tancredi

Yo soy Tancredi y esta es la historia de cómo me convertí en fuego. Fue en el año 2510, trescientos años antes de la Rebelión de las mujeres Taigú. Siempre estuve muy orgullosa de mi piel morada, la bruja que me crío me decía también que yo llevaba el fuego en el cabello, por eso siempre iba ensortijado, y su resplandor anaranjado bailaba salvaje con el viento. Yo hacía bailar a las flores, a los árboles y ellos me cantaban, me susurraban secretos, me compartían su alma, entonces yo podía construir un puente de energía entre la naturaleza y los … Continúa leyendo Manuela Herazo Martínez: Tancredi

Rakel Hoyos: El planeta de las brujas

De regreso a la nave, Ikber pensaba en lo que le diría a la capitana sobre el fracaso de su encomienda. No era el temor a ser reprendida lo que le preocupaba, sino la frustración por no haber logrado su cometido. La confundían también diversos sentimientos que le provocaron los terrestres. Sabía que el planeta era poco avanzado, pero nunca imaginó que en tales dimensiones como las que había tenido que presenciar. Cuando la tripulación arribó a la Tierra, se planteó que la misión duraría poco tiempo. Adaptaron sus comunicadores a los distintos idiomas que se hablaban en el planeta … Continúa leyendo Rakel Hoyos: El planeta de las brujas

Miranda Campos: Ojos violetas

Para Clau. Mi abuela tenía su casa llena de dos cosas: de libros y de vacas. Figuras, cuadros, pinturas, tapices, esculturas de diferentes tamaños, colores, y materiales. Visitar su hogar era llegar a un establo de vacas multicolor que olían a biblioteca. Ávida lectora desde joven, disfrutaba con pasión del té y nunca le conocí pareja. Poco sabía de mi abuelo quien la abandonó misteriosamente poco después de que nació mi madre, nunca hizo falta, ciertamente la calidez de mi abuela iluminaba todo, sus historias y saberes fueron mi mayor diversión al crecer y la duda más evidente se apoderó … Continúa leyendo Miranda Campos: Ojos violetas

 Laura Elena Cáceres: La ruptura

Su teléfono suena constantemente. Procura ignorarlo, su cabeza está en muchas situaciones a la vez. Recibe mensajes, Franky le avisa que no puede impedirles el paso. No puede renegar, Astrid es el puente de comunicación con los dioses que les guían en las decisiones de Laguna Madre. Está vestida para el momento, cómoda pero ligera: un vestido rojo corte imperio porque sabe que es atrayente. Les hace creer que ellos tienen la ventaja, deja a la vista los tatuajes de su serpiente en el brazo izquierdo. Se suelta el cabello negro que llega a los hombros, se pinta los labios … Continúa leyendo  Laura Elena Cáceres: La ruptura

Kimberly Patricia Juárez : Plegaria a mis hermanas

La magia y el poder nos mantienen en pie de lucha. Muchos piensan que nos tienen congeladas o atrapadas en los libros de cuentos, que nuestra existencia sólo es para asustar a los niños o para atraer algún ser a su lado. Pero quién diría que nosotras seríamos las primeras en levantarse, listas hacia la batalla; así como fuimos las primeras en caer, en ser oprimidas, estigmatizadas, maldecidas y asesinadas por nuestra naturaleza mágica. Ahora, sin importar nuestro andar, nos mantendremos en el camino; ya no permitiremos que ningún ser sobre la tierra vea sólo lo que sus ojos quieren. … Continúa leyendo Kimberly Patricia Juárez : Plegaria a mis hermanas