Ana Jácome: Micelio
Respiras. El fango te arropa, hueles a mezcla de arcilla y agua. Te miras los dedos pequeños como brotes, desentumes las hifas largas que se estiran cual piernas. Bostezas. Arriba ya cantan las aves, la luz matutina acaricia las hierbas y el suelo bebe el rocío en gotitas. Escuchas las patas de algún escarabajo inquieto que también comienza el día. Te rascas la cabeza; lejos, bajo tu espalda, sientes el paso lento de una lombriz de tierra. Te encoges en tu pequeñez y luego te expandes para dejar escapar una voz que suena a minerales, nace en tu boca de … Continúa leyendo Ana Jácome: Micelio

