Inevitablemente, con los minutos pululando sobre cuerpos, el desgarro interno llena
rompiendo partes,
resquebrajando hielo,
hundiendo al fondo una boca de lamentos.
Aleteos forzados interrumpen la incandescencia, brillando entre aullidos, atrapando ráfagas de viento.

Zaira Moreno, mexicana de 23 años, comunicóloga y partidaria de las experiencias.