
Griselda Córdova: Sea su propio dios
Al signar el consentimiento informado, el arrepentimiento dejó de ser opción. Ahora, en nombre de la ciencia, mi único y último oficio consistía en caer. Eso, y llevar un registro de mis últimas palabras antes de que suceda. Experimentar el Horizonte sólo había sido posible, hasta el momento, gracias a la precisión casi perfecta de los simuladores, pero sobre todo a partir de la formulación de una metafísica cuántica. Todo en el terreno de la abstracción más verosímil, pero abstracción, a fin de cuentas. Los registros comunales, que comprendían desde sus inicios hasta hace poco más de dos décadas, demostraban … Continúa leyendo Griselda Córdova: Sea su propio dios