
Aileen Borghols: La cena
Tomó un par de velas de su altar y las encendió para iluminar su comedor, las lámparas no le daban el mismo ambiente. Con el cerillo casi quemándole los dedos, encendió un incienso. Revisó que el florero tuviera suficiente agua, se acercó a las flores que empezaban a verse algo marchitas. Mañana las cambiaria. Por hoy, esto debería ser suficiente. Estaba satisfecha con sus preparaciones. La mujer se sentó a la mesa a cenar, costumbre recién adquirida para llenar las horas con pequeños rituales que la distraen del silencio. Admiró por unos segundos su servicio perfectamente colocado, antes de tomar … Continúa leyendo Aileen Borghols: La cena