Kiara-Li Adler: Niña elefante
El niño no paró. Por más que la niña exigió, pidió y rogó, él continuó, día tras día, recreo tras recreo, él siguió diciéndole: «elefante». ¡Elefante! ¡Elefante! ¡Elefante! Se hacía el eco dentro de ella, un eco vivo, que a veces respiraba bajito, y ella casi no lo escuchaba; y otras veces sonaba tan fuerte, que retumbaba en su cabeza y la hacía vibrar, hasta hacerla gritar, correr, girar. Y giró y gritó, tan rápido, tan fuerte, que creció y creció en un musth tan intenso que en uno de los giros con su pata derecha al niño aplastó. Kiara-Li … Continúa leyendo Kiara-Li Adler: Niña elefante

